Penny Dreadful, la serie que no pude vender
Que un mal chiste no te arruine una buena historia
Hay un nuevo virus que amenaza todos los grandes estrenos: la expectativa.
Que un mal chiste no te arruine una buena historia
La compleja red argumental que se plantea despierta tu imaginario: aparecen 'Los Soprano', 'LA Confidential' o 'La Dalia Negra'. Y recuerdas por qué este tipo de ficción ya se ha visto tantas veces: porque es cojonuda; y asimismo comprendes que esta temporada también puede serlo, incluso ves posible que trama y traumas estén más y mejor entrelazadas que en la primera temporada.
Decir que “Juego de Tronos” ya no es lo que era puede costarme caro, pero me la suda. Después de una quinta temporada capaz de matar a varias cabras del aburrimiento, ha comenzado una guerra subterránea. Renegados de la serie contra devotos. Lectores de Martin indignados contra los que están hartos de los lectores de Martin indignados. Serie contra libros. Pim, pam. Y en el fragor de la batalla, una pregunta: ¿hemos sobrevalorado 'Juego de Tronos' hasta la ridiculez? Seh.
Y si vivir entre zombies y matorrales es tan aburrido, ¿por qué follar tan poco?
La saturación de ofertas de ocio, la multiplicidad de ventanas y los inputs exteriores que nos llegan en todo momento están haciendo que la experiencia íntima y personal de ver nuestra serie sea cada vez más difícil y compleja.
Damon Lindelof explota. Damon Lindelof pasa del final de perdidos. Damon Lindelof pasa de tu cara. ¡Armas, apunten, acción!
Analizamos la irregular trayectoria del productor, director y guionista neoyorquino después de saltar a la fama con Lost.