John Constantine, exorcista a domicilio
Ni al técnico de Telefónica, ni al repartidor de Telepizza, ni siquiera al kebabdepolloamigo —que recientemente has descubierto que tiene servicio a domicilio— esperarías con más impaciencia
Muchos de los guiones detrás de las series antes han sido historietas.
Series y cómic, un matrimonio indivorciable.
Ni al técnico de Telefónica, ni al repartidor de Telepizza, ni siquiera al kebabdepolloamigo —que recientemente has descubierto que tiene servicio a domicilio— esperarías con más impaciencia
Algunas reflexiones sobre la abundancia de los superhéroes en las últimas ficciones seriales
Si esperas que “Gotham” sea la presencia amenazadora que hasta ahora habías disfrutado en los cómics de Batman, te llevarás un soberano cabreo. Si prefieres darle una oportunidad partiendo de cero, olvidando 75 años de leyendas gothamitas, seguramente te toparás con un thriller policial correcto que no necesita la imaginería de Batman para cobrar sentido.
"Queridísimo agente parrander, te están enfrentado a H.Y.D.R.A. cuando el mundo entero te recordaba por haber intentado hacerle tras tras por detrás a un Dios."
Viagra televisivo para radicales de la viñeta; bienvenidos a mi sueño húmedo.
Joss Whedon lo ha vuelto a hacer. Ha vuelto a jugar con nuestros sueños frikoides más húmedos. Joss Whedon at the paredón.
Las viñetas y la pequeña pantalla tienen un tórrido e idílico romance que se basa en la confianza mutua. Aquí va un breve y fugaz análisis de esta bella historia de amor.