'Transparent': series que los nietos deberían ver - Serielizados
Rough Mix: ‘Transparent’ en 4 canciones de Eels

Series que los nietos deberían ver

Los Pfefferman y los Everett. Dos tragedias, dos comedias, dos traumedias. Nada mejor que Eels y 'Transparent' para resucitar en un día de resaca emocional. Hay luz en el drama cotidiano. Goddamm right, it’s a beautiful day!
eels jill transparent betu martínez serielizados

El mumblecore y el lo-fi cogidos de la mano. El cine indie norteamericano y el rock alternativo que huye de la alta definición y de las filigranas sonoras se encuentran una tarde de primavera para contarle al mundo sus mierdas. Eels meets Transparent.

Hijo del primer físico que propuso la teoría de los universos paralelos, la historia de Mark Oliver Everett es de pegarse un tiro o de acabar siendo el puto amo. En el 82 Hugh Everett III, su padre, murió y lo dejó a los 19 años con su madre depresiva y su hermana esquizofrénica. El futuro Mr. E encontró en la música su refugio y en 1985 publicó su primer trabajo, Bad Dude in Love. 11 años después encontró el reconocimiento con la publicación de Beautiful Freak y el temón “Novocaine For The Soul”. Todo pintaba perfecto, hasta que ese mismo año, en 1996, su hermana se suicidó y al cabo de dos años su madre murió de cáncer. De ahí surgió un álbum con letras trágicas y melodías depresivas: Electro-Shock Blues. Y a partir de ese momento montaña rusa de emociones, altybajos a cascoporro, pero siempre con la música como terapia.

Jill Soloway siempre notó que algo raro había en su familia, “nada que fácilmente pudiera identificar”. Ese “algo raro” lo acabó descubriendo en 2010, cuando su padre rompió el silencio después de casi toda una vida y admitió que no se sentía hombre y que quería ser una mujer. Ese anuncio dislocó el núcleo familiar y dejó a Jill con un problema de identidad galopante que afectó a su “autenticidad creativa”. Una autenticidad que Soloway lleva intrínseca y que ya nos mostró como guionista de United States of Tara (2009-2011) y de SOBRE TODO A dos metros bajo tierra (2001-2005). Después de estas magníficas series (la primera buena, la segunda historia de la televisión), Soloway tuvo que lidiar con sus problemas familiares y la mejor forma de sobrellevarlos fue traspasar su drama familiar a la pantalla en el 2014 con Transparent, una maravilla de la televisión actual que nos habla de la identidad sexual, del judaísmo y de la artificialidad de las familias artsy de Los Ángeles. Un fresco de la vida de Soloway que le ha permitido denunciar una realidad social como el transgénero y ya de paso hacer revisión de su propia experiencia vital.

Jeffrey Tambor en ‘Transparent’

Si algo han hecho Mark y Jill es no parar de buscar su identidad. Como Josh, Sarah, Ali o Maura, protagonistas de Transparent. Hijos de familias majaretas que buscan sin cesar la manera de encontrarse a sí mismos, de aferrarse a alguien, a algo. Un camino con rumbo pero sin destino final, como relata Mark en sus más de ocho álbumes y Jill en las -de momento- tres temporadas de su serie. Transparent y las canciones de Eels son su terapia, crear para no tener que ir al psiquiatra. La cueva perfecta para un domingo de solitud y tristeza. Ideal para resituarse y aprender qué y quién cojones somos en este jodido mundo. Ambos tienden al drama pero siempre pasan, antes o después, por la frescura de la ironía. Aquí no existe el romanticismo cupcake. El cliché está a mil jodidas millas en la narración de Jill y Mr. E. Esto va de abrazar su tragedia, sin ser un dramaqueen barato. Los representantes más fiables y honestos de los “first world problems”.

Sus personajes son ladrones de almas, adictos a la inestabilidad de vivir una vida nunca al alcance de sus expectativas. En su memorable autobiografía Cosas que los nietos deberían saber, Mark hace un ejercicio de regresión, de mirar al pasado para poder escribir sobre el presente, para poder seguir adelante. Jill y Mark nos han enseñado cómo contar historias personales y familiares sin caer en el factor lacrimógeno. Con muy buen pulso, con muy buena letra y mucha modestia. Hablan desde la autoconsciencia, desde el pozo del desastre emocional al que, atentos a no caer, terminan precipitándose una y otra vez. Si algún día se decide adaptar Cosas que los nietos deberían saber a serie o peli, espero que le den el proyecto a Soloway. La vida de Mr. E en serie de TV sería la traumedia definitiva. El sueño húmedo de todo hipster.

De momento me quedo con esta paja mental, con esta suposición de imaginarme las canciones que Mark Oliver Everett le cantaría a los Pfefferman. Unas letras dedicadas a una de las familias que mejor representan el drama postmoderno. Humanos, almas lo-fi, aquí el Rough Mix de nuestra caída y auge incesante:

 

1. ‘Mistakes of my youth’ y Josh

I keep defeating my own self, and keep repeating yesterday”

Tropezar siempre con la misma piedra, ese es nuestro Josh. No acabará de encontrarse a sí mismo, de repetir los errores del pasado, a pesar de que parece ver siempre la luz al final del túnel, siempre cae de cuatro patas en esto de las relaciones humanas. Propenso a ver el oasis antes de lo que toca. El personaje más frágil y emocional de esta serie es un hombre y se llama Josh.

2. ‘Beautiful Freak’ y Maura y Mort

Some people say you have a problem, but that problem lies only with them”

Maura es Mort, pero tambíen es Maura. Dos personalidades en un sólo cuerpo mutante que acaban haciendo la criatura más adorable de la serie. Un personaje que a pesar de todo acaba haciendo lo que le da la real gana, siendo la rareza que es para un mundo demasiado etiquetado. Su ego crece a medida que avanzan los capítulos. Un ego sin el cual la translación de Mort a Maura hubiera sido imposible. Amor y odio a partes iguales.

3. ‘Parallels’ y Sarah

Woke up lost in a world I can’t escape. What I’ll become is slowly taking shape”

En medio del devenir, Sarah se presenta como la representación de la madre de familia, con marido, hijos y una vida estable. Todo muy normal. Demasiado como para ser verdad. Tiene el sentimiento de estar perdida en medio de la comodidad. Quiere el cambio, quiere aventura, le gusta la marcha y está dispuesta a romper con todo lo que ha construido para sentirse libre de nuevo. Su objetivo es dar paso a la otra Sarah que hay en su interior y enterrar a la actual.

4. ‘Novocaine for the soul’ y Ali

Life is good and I feel great, cause mother says I was a great mistake”

Es el miembro sobrante de la familia. Si Sarah se presenta como la hija con marido y descendecia y Josh como el artistilla decadente, Ali es la hija que va ciega de éxtasis cuando su padre le cuenta que ya no se siente hombre. La “screw up”. La hija que vive al margen de todo pero que poco a poco se va dando cuenta e irá tomando responsabilidad de la familia que le ha tocado. Será quien acabará cambiando los pañales de todos sus familiares, incluyendo los suyos.

en .

Ver más en Decibelios, First World Problems, Transparent.