Comparte

Gracias a las plataformas audiovisuales como Netflix, HBO o Sky, hoy aún es más fácil hacer maratones de series y películas, incluso sin necesidad de apretar un solo botón: termina lo que estamos viendo y ya nos aparece el tentador mensaje que el siguiente capítulo se cargará en unos segundos. El problema llega cuando no sabes decir basta y apagar la pantalla.
Esto es lo que le ha ocurrido a un joven de 26 años sin empleo, según ha diagnosticado el Instituto Nacional de Salud Mental y Neurociencia de Bangalore, en la India. El director del servicio y profesor de psicología clínica, Manoj Kumar Sharma, ha detallado que el hombre empezó a pasar más de siete horas diarias viendo películas y series sin parar en Netflix, porque le hacía sentirse bien y que ya llevaba más de seis meses así.
«Cada vez que su familia le insistía que debía encontrar un trabajo, o cuando veía que las cosas les iban bien a sus amigos, se dedicaba a ver las series disponibles sin parar. Era una manera de escapar. Así se olvidaba de sus problemas», dice el doctor Sharma en declaraciones recogidas por The Hindu.
La adicción a Netflix le llevó a tener problemas de tensión ocular, fatiga y alternación del sueño. Para superar la adicción los doctores de la clínica le han prescrito ejercicios relajantes, lo han tratado a través de terapia y guiándolo en sus opciones profesionales.
El consejo del doctor Sharma: «lo mejor es evitar el uso de la tecnología como mecanismo de enfrentamiento».