El creador de ‘Borgen’ se pasa a la música en su nueva serie

Una escena de 'La Orquesta' la nueva serie del creador de 'Borgen'.

Tras abordar el mundo de la política danesa magistralmente en Borgen y posteriormente el de la religión en la infravalorada Algo en que creer, el guionista y productor danés Adam Price se pasa a la música para abordar la vida en una orquesta sinfónica.

Así pues, el próximo martes 20 de junio, llegará a Filmin la nueva serie de Price, La Orquesta.  Se trata de una comedia dramática de 10 episodios en la que el danés Adam Price da rienda suelta   su pasión por la música clásica introduciendo al espectador en el interior de la Orquesta Sinfónica de Copenhaghe. Allí se desarrolla una peculiar relación de amistad entre Jeppe Nygren, que asume el cargo de director adjunto de la orquesta, y el segundo clarinetista, Bo Høxenhaven.

Jeppe Nygren y Bo Høxenhaven, protagonistas de ‘La Orquesta’ son la noche y el día. 

La serie ironiza sobre aspectos vinculados al mundo de la música clásica: el éxito y el fracaso, la pasión artística y los obstáculos institucionales, o los abusos de poder y el #Me too. De hecho, su estreno en Dinamarca tuvo que retrasarse por las similitudes de una de sus tramas con el escándalo del Coro Nacional Danés de Niñas, en el que se denunciaron repetidos casos de acoso sexual e intimidación entre 1970 y 2010, definidos por la prensa danesa como «el mayor caso de #MeToo en el país».

La Orquesta, ganó tres premios Robert, los Oscar del cine y la televisión danesa, y está protagonizada por Frederik Cilius Jørgensen y Rasmus Bruun, interpretanto a Bo y Jeppe, respectivamente. Una especia de extraña pareja la que forman estos dos a tenor de las declaraciones del director de la serie, Mikkel Munch-Fals, sobre ambos protagonistas:»Jeppe es el típico complaciente que, para no causar problemas, se guarda sus opiniones para sí mismo, mientras que Bo es el solitario gruñón que siempre dice la verdad, caiga quien caiga. Jeppe busca compromiso y Bo es intransigente. Jeppe es un complaciente de principio a fin, mientras que Bo es un imán para el conflicto».

El director, además, explica que son, precisamente, sus caracteres opuestos los que construyen una relación especial para el espectador: «Ambas maneras de afrontar la vida causan soledad y los dos hombres aprenderán el uno del otro para encontrarse en un punto medio, en un lugar donde nadie agrede al otro ni se hiere a si mismo». Los fans de Borgen pueden estar de enhorabuena, se avecina nueva adicción danesa al canto.